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Cualquiera que se ha paseado por el Raval de Barcelona sabe que ciertos signos, banderas, consignas o estéticas van a ser muy mal vistos por el resto de transeúntes. Lo mismo sucede, pero en sentido ideológico opuesto, si uno camina por la Plaza de la Rinconada de Valladolid.
De hecho, las diferencias ideológicas entre las distintas partes de España son más grandes de lo que podríamos imaginar intuitivamente: en Cantabria o Madrid, casi el 6% de la población se identifica con posiciones de extrema derecha, mientras que en Sevilla o Barcelona todo el bloque de la derecha (incluyendo la moderada) no alcanza el 10% del espectro ideológico.
Se podría argumentar que son las características demográficas, las geografías económicas y otras cuestiones las que determinan esas dispares distribuciones de votantes. Sin embargo, un par de comparaciones nos hará ver rápidamente que esto no tiene por qué ser cierto:
Si comparamos la distribución ideológica de los votantes en las ciudades de Madrid y Barcelona, observaremos que los partidos tienen que enfrentarse a una competición completamente distinta: en Barcelona, la curva está extremadamente desviada hacia la izquierda.
Pero veamos otra comparación...
Lo mismo sucede en la comparación entre Murcia y Asturias, dos comunidades uniprovinciales, de similares densidades y economía basada en recursos primarios y servicios. Mientras en Murcia la campana está completamente centrada, en Asturias aparece una fuerte desviación hacia la izquierda. Y esto afecta completamente a quién será el partido predominante en esa arena electoral.
El Ránking Ideológico
Llegó el momento más esperado. En el ránking podemos observar la clasificación de comunidades (y ciudades) de acuerdo a su media ideológica.
Ahora, hágase las siguientes preguntas y trate de responder honestamente. ¿Le gustaría vivir en un sitio rodeado de gente izquierdosa? Pues váyase a Barcelona (3,99) o Sevilla (4,42). Incluso Navarra (4,51) es más roja de lo que el Opus nos hace creer. ¿O bien prefiere un lugar donde los valores "de siempre" estén presentes, y pueda ir a misa sin ser mal visto? No lo dude más, dese un lujo y váyase de vacaciones a tomar unos buenos vinos a la Rioja (5,34) o orillas del Duero (5,33).
Siga haciéndose preguntas. ¿Le gustaría vivir en un sitio donde todo el mundo piensa más o menos igual? Pues a que espera: en Barcelona, Aragón o Murcia es difícil encontrar a alguien que no piense "como la mayoría" (bajo nivel de dispersión). Si por el contrario lo que a usted le pone de verdad es entrar en un bar y meter cizaña hasta que todos acaban discutiendo a muerte sobre lo malo que es ZP o Rajoy, ya tarda en irse a Cantabria o Asturias, dos comunidades muy polarizadas ideológicamente.
Obviamente, esas diferencias ideológicas tienen su reflejo en el voto. Si separamos a los partidos entre conservadores y progresistas, vemos claramente como la media ideológica es seguida por el nivel de voto (en esta caso, muestro el nivel de voto conservador previsto por el CIS para las próximas elecciones):
Fuente: Elaboración propia con datos del CIS 2007 - CCAA y Ciudades (17 encuestas con muestras superiores a los 900-1000 entrevistados)
Nota: En la tabla de voto a partidos conservadors, los casos extraños (outliers) se explican porque se ha considerado conservador a partidos nacionalistas de centroderecha (p.ej. PNV) o bien porque un partido es difícilmente ubicable en la escala ideológica (CC) y es relegado a la casilla "otros partidos".
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Cualquiera que se ha paseado por el Raval de Barcelona sabe que ciertos signos, banderas, consignas o estéticas van a ser muy mal vistos por el resto de transeúntes. Lo mismo sucede, pero en sentido ideológico opuesto, si uno camina por la Plaza de la Rinconada de Valladolid.
De hecho, las diferencias ideológicas entre las distintas partes de España son más grandes de lo que podríamos imaginar intuitivamente: en Cantabria o Madrid, casi el 6% de la población se identifica con posiciones de extrema derecha, mientras que en Sevilla o Barcelona todo el bloque de la derecha (incluyendo la moderada) no alcanza el 10% del espectro ideológico.
Se podría argumentar que son las características demográficas, las geografías económicas y otras cuestiones las que determinan esas dispares distribuciones de votantes. Sin embargo, un par de comparaciones nos hará ver rápidamente que esto no tiene por qué ser cierto:
Si comparamos la distribución ideológica de los votantes en las ciudades de Madrid y Barcelona, observaremos que los partidos tienen que enfrentarse a una competición completamente distinta: en Barcelona, la curva está extremadamente desviada hacia la izquierda.
Pero veamos otra comparación...
Lo mismo sucede en la comparación entre Murcia y Asturias, dos comunidades uniprovinciales, de similares densidades y economía basada en recursos primarios y servicios. Mientras en Murcia la campana está completamente centrada, en Asturias aparece una fuerte desviación hacia la izquierda. Y esto afecta completamente a quién será el partido predominante en esa arena electoral.
El Ránking Ideológico
Llegó el momento más esperado. En el ránking podemos observar la clasificación de comunidades (y ciudades) de acuerdo a su media ideológica.
Ahora, hágase las siguientes preguntas y trate de responder honestamente. ¿Le gustaría vivir en un sitio rodeado de gente izquierdosa? Pues váyase a Barcelona (3,99) o Sevilla (4,42). Incluso Navarra (4,51) es más roja de lo que el Opus nos hace creer. ¿O bien prefiere un lugar donde los valores "de siempre" estén presentes, y pueda ir a misa sin ser mal visto? No lo dude más, dese un lujo y váyase de vacaciones a tomar unos buenos vinos a la Rioja (5,34) o orillas del Duero (5,33).
Siga haciéndose preguntas. ¿Le gustaría vivir en un sitio donde todo el mundo piensa más o menos igual? Pues a que espera: en Barcelona, Aragón o Murcia es difícil encontrar a alguien que no piense "como la mayoría" (bajo nivel de dispersión). Si por el contrario lo que a usted le pone de verdad es entrar en un bar y meter cizaña hasta que todos acaban discutiendo a muerte sobre lo malo que es ZP o Rajoy, ya tarda en irse a Cantabria o Asturias, dos comunidades muy polarizadas ideológicamente.
Obviamente, esas diferencias ideológicas tienen su reflejo en el voto. Si separamos a los partidos entre conservadores y progresistas, vemos claramente como la media ideológica es seguida por el nivel de voto (en esta caso, muestro el nivel de voto conservador previsto por el CIS para las próximas elecciones):
De forma que si a usted, lector moquetero, le sienta mal que el partido contrario gane siempre en su Comunidad Autónoma... no insista: emigre a otra vecina, que afortunadamente para gustos, colores.
Fuente: Elaboración propia con datos del CIS 2007 - CCAA y Ciudades (17 encuestas con muestras superiores a los 900-1000 entrevistados)
Nota: En la tabla de voto a partidos conservadors, los casos extraños (outliers) se explican porque se ha considerado conservador a partidos nacionalistas de centroderecha (p.ej. PNV) o bien porque un partido es difícilmente ubicable en la escala ideológica (CC) y es relegado a la casilla "otros partidos".
Etiquetas: barcelona, ciencia politica, españa, guía ideológica de..., Madrid, politica
muy interesante, Alex.
sólo tengo una pequeña objeción, ¿por qué llamas Barcelona a Catalunya? Ay, este centralismo barcelonés. Chico, qué Lleida, Girona y Tarragona también existen!
En serio, los datos son de todo Catalunya o sólo de la provincia de Barcelona?
Aclaración pues: Creo que no he dicho Catalonia en todo el texto, sino diversas ciudades y comunidades autónomas.
La oleada preelectoral del CIS incluye 5 ciudades (Madrid, Santiago, Sevilla, Vitoria y Barcelona), así como 13 comunidades autónomas. Los datos referidos a ciudades quedan denotados por el símbolo (c).
Y no soy centralista barcelonés. A mi es que el resto de Catalunya me da un poco igual. Como si quieren trasladar la capital a Viella. :D
Espero que con eso quede aclarado que no quería tomar la parte por el todo. ^_^
Parte 2 del asunto: intentar cruzar el asunto con otros elementos, buscando correlaciones como un loco al más puro estilo durkhemiano. Al final, acabará uno por mandarlo todo a tomar y decir "no, es cosa de cultura política", al más puro estilo Inglehart.
Ay, la multicausalidad, cómo me gusta. Tan esquiva ella... me recuerda a Rita Hayworth. "Put the blame on me..."
Muy buen artículo. Con su permiso de usted, me lo guardo en el disco duro y lo usaré en el futuro para pequeñas cábalas.
A su servicio quedo, ussía.
aclarado entonces. tienes razón, no te leí con suficiente atención. es sólo que al mirar el último gráfico llamaba la atención que no saliera Catalunya pero sí Barcelona.
En fin, la culpa entonces de las encuestas, cómo si pudiéramos generalizar lo de Barcelona al resto del territorio! que se lo pregunten a los del Solsonès o la Cerdanya...
aclarado entonces. tienes razón, no te leí con suficiente atención. es sólo que al mirar el último gráfico llamaba la atención que no saliera Catalunya pero sí Barcelona.
En fin, la culpa entonces de las encuestas, cómo si pudiéramos generalizar lo de Barcelona al resto del territorio! que se lo pregunten a los del Solsonès o la Cerdanya...
Muy currado. El que hay que hacer después de las elecciones es el de los barrios de Madrid. Puede quedar bien curioso.
Xx
El tema es apasionante... Angel Bahamonde, uno de los mejores historiadores de España, decía que, de hecho, las corrientes políticas en España seguían siendo más o menos las mismas que hace un siglo... Decía él que, si mirábamos los lugares donde el golpe de Estado del 36 había triunfado, correspondía exactamente a los lugares donde la derecha tiene más votos en la actualidad... Y viceversa, los lugares donde la República había obtenido más apoyos (en la costa y en las grandes ciudades) sigue hoy gobernada por la izquierda... Parece que las cosas no han cambiado tanto (aunque seguro que hay excepciones...)
Falta incorporar cómo varía el significado de conceptos como "derecha" e "izquierda" a lo largo de la geografía española. Comparando esa campana casi perfecta con lo que se vive en la política regional y con los resultados electorales, me gustaría saber qué es exactamente lo que entiende un murciano por "centro" (aka 5-6).
Dani, no es exactamente así. Pero en todo caso, si te esperas a leer mi tesis, te lo contaré mejor!
-ahora bien, tendrás que esperar mínimo hasta el 2008 ;) -
por cierto, Dani, Bahamonde, decía ésto en algún libro?
Ruibérriz, toda la razón. Afortunadamente lo de arriba es una photo-finish de Mayo de 2007, y por tanto derecha e izquierda significan... lo que diablos signifiquen este mes en cada provincia.
- ¿Cómo dice? Yo voto lo que dice el señor caci... digo, el señor alcalde. Como hacía mi padre, y el padre de mi padre.
- Entonces pongo centro, ¿no?
Ruibérriz viene a apuntar, acertadamente a mi parecer, la parte 3: o de qué coño sirve en realidad la escala tipo Lijphart de autoposicionamiento tipo izquierda-derecha. El otro día le comentaba a un profesor que es como la democracia: más o menos, el método menos malo.
Laia, ya te rularás la tesis :P
Likert, coño, Likert. Que me confundo siempre.
Inconvenientes y ventajas de la escala de Likert
* Puede obtenerse una misma puntuación con diferentes combinaciones de ítems, lo que demuestra que la misma puntuación puede tener significados distintos. (No obstante, la consistencia interna tiende a evitarlo).
* En cambio, la escala es de fácil construcción y aplicación.
* Puede utilizar ítems no relacionados manifiestamente con el tema (pero sí de forma latente).
* A pesar de la ausencia de teoría justificativa para la "escalabilidad", en la práctica, las puntuaciones del cuestionario Likert proporcionan con frecuencia la base para una primera ordenación de la gente en la característica que se mide.
* El problema está en determinar cuándo tiene consecuencias para el significado de una misma puntuación el hecho de poder ser alcanzada por distintos medios y cuando no las tiene.
Claro que hay un problema de percepción. Yo creo que los madrileños consideran como centro, en otras comunidades sería derecha o incluso extrema derecha.
Claro, David, así que sería cuestión de hacerles una batería de preguntas sobre valores y actitudes (tipo Klingemann en Party Manifesto) y descubriríamos quién miente comparando su visión de izquierda derecha con la "verdad más verdadera". :)
Hoy a cuento de ello estuve mirando un poco cómo son los madrileños.
Muy interesante!!! Aunque confunde algo lo de mezclar comunidades con ciudades.
Nada inesperado para mi... Barcelona, la cuna de la izquierda (39,8%) y Madrid la del centro neoliberal (52,2%). Por cierto, no sé como se calcula la dispersión, pero me parece que en madrid es donde menos diversidad ideologica hay a juzgar por tus números.
saludos!
http://opresiondigital.blogspot.com
Uhm... Cornelio Escipión [Emiliano]... me encanta tu nick.
La dispersión no es más que la desviación típica, que simplemente es es el "promedio" o variación esperada con respecto de la media aritmética.
Esto quiere decir que, a mayor desviación típica, mayor dispersión de tus datos hay respecto a la media aritmética (más lejos tienden a estar).
Un número bajo, por el contrario, querria decir que tus datos tienden a estar más cerca y a solaparse.
En este sentido, la dispersión de opiniones es mayor en Madrid que en Barcelona (simplemente porque la pregunta te hace puntuar de 1 a 10 tu ideología, y apuesto a que hay gente en Barcelona que querría poner -3 (ultrasuperizquierdadeverdad), en cuyo caso veríamos que también hay dispersión en Barcelona. :)
Espero que aixó aclareixi algo.
Una entrada apasionante, si señor! A mi siempre me ha hecho gracia las diferencias entre las dos Castillas. En teoría son territorios bastante homogeneos pero sus gobiernos casi siempre han sido de color político distinto. ¿por qué?
Yo tengo una hipotesis: por coynuturas (carisma candidato, etc) al principio en una castilla ganó el psoe. Como este partido se declara de izquierdas, se ha producido un proceso circular, donde las élites han influido a la ideología del electorado y no al revés.
Una manera sencilla de corroborar esto sería ver si en 1980 las Castillas eran ideológicamente iguales y luego ver como a partir de entonces la Mancha se ha ido izquierdizando por influencia del gobierno regional socialista. Me encantaria mirarlo...