Hoy Público nos informa de la siguiente noticia: “un estudio del PSOE atribuye la derrota del PP a su radicalismo”. Lean un recorte:
Mientras que el 71% percibe al PSOE como un partido moderado y sólo una reducida minoría del 16% lo considera muy o bastante radical, en el caso del PP sucede lo contrario: el 51% ve a este partido como muy o bastante radical y sólo el 37% cree que es moderado.
Estos datos presentados de forma agregada no nos ofrecen toda la riqueza del asunto. Desafortunadamente, la Moqueta Verde no dispone de este estudio, pero creemos que sería sumamente interesante tener este dato por grupos ideológicos. ¿Quién considera al PP como un partido radical? ¿sus votantes? ¿Los de centro? ¿Los del PSOE e IU? De algo parecido hablamos hace unos meses en la anotación: Las malas notas de Rajoy… ¿o no tan malas?
Las consecuencias políticas de quien considera al PP como radical son muy relevantes. Si son los votantes de izquierdas los que perciben al PP como radical, el resultado es que se activa “el voto del miedo”. En estas situaciones el PSOE se convierte en el punto focal de los votantes de izquierdas. El PP no perdería votantes en términos absolutos, pero su estrategia provocaría un aumento del voto al PSOE y, por ende, una pérdida relativa de votos. Algo similar ya comentamos en un artículo en Si ministro (centrarse para no asustar). Del artículo de Público se desprende que las conclusiones del PSOE van en este sentido.
Pero si los que perciben al PP como un partido radical son los votantes de centro, el resultado más probable es que los populares pierdan parte de su base electoral. Es decir, la pérdida de votantes del PP sería no sólo en términos relativos sino también en absolutos.
Dejadme que deje como evidencia empírica datos del CIS para ver cómo se comportaron los votantes de centro. Los dos gráficos de abajo comparan el recuerdo de voto por grupos ideológicos entre las encuestas postelectorales de 2004 y 2008. Los datos del CIS parecen indicar que quien más votantes de centro perdió en las últimas elecciones fue precisamente el PSOE, quien paso de recibir de un 40 a un 20 por ciento de los que se ubican ideológicamente en el 5. En cambio, este efecto no está tan claro en el caso del Partido Popular, cuyas pérdidas en ese espacio ideológico son más modestas.
El centro político según los datos del CIS se fue especialmente (en comparación a los otros grupos ideológicos) a las categorías de abstención y el misterioso “no contesta”. Está claro que por lo general el centro político no quedó satisfecho con la situación política de la anterior legislatura. Ambos partidos jugaron por los extremos; y parece ser que el PSOE es el que perdió más apoyos entre ese electorado.
Si el PP es muy radical y el PSOE muy poco, ¿por qué este último partido perdió más apoyos entre los votantes de centro? A priori parece algo incompatible, aunque como siempre hay muchos otros factores que entran en la ecuación. La explicación más sencilla, pero, es que simplemente los ciudadanos que valoran al PP como muy radical son sólo los votantes de izquierdas que no votarían al PP de todos modos. La opinión de los votantes de centro parece ser que es incluso la opuesta. A falta del estudio del PSOE, el instinto nos dice que, en la pasada legislatura, los votantes de centro percibieron especialmente al PSOE como un partido radical.
Conclusiones: El PP debe mejorar el efecto rechazo que generó su estrategia electoral de la pasada legislatura entre los votantes de izquierdas y que acabó activando el voto del miedo. Por otro lado, el PSOE debe tomarse en serio su perdida de base electoral entre los votantes de centro efectuando una legislatura más sosegada. Ya lo contaremos con más detenimiento en futuras anotaciones, pero la moqueta tiene la impresión que la tarea del PSOE puede ser más difícil que la del PP.
Las consecuencias políticas de quien considera al PP como radical son muy relevantes. Si son los votantes de izquierdas los que perciben al PP como radical, el resultado es que se activa “el voto del miedo”. En estas situaciones el PSOE se convierte en el punto focal de los votantes de izquierdas. El PP no perdería votantes en términos absolutos, pero su estrategia provocaría un aumento del voto al PSOE y, por ende, una pérdida relativa de votos. Algo similar ya comentamos en un artículo en Si ministro (centrarse para no asustar). Del artículo de Público se desprende que las conclusiones del PSOE van en este sentido.
Pero si los que perciben al PP como un partido radical son los votantes de centro, el resultado más probable es que los populares pierdan parte de su base electoral. Es decir, la pérdida de votantes del PP sería no sólo en términos relativos sino también en absolutos.
Dejadme que deje como evidencia empírica datos del CIS para ver cómo se comportaron los votantes de centro. Los dos gráficos de abajo comparan el recuerdo de voto por grupos ideológicos entre las encuestas postelectorales de 2004 y 2008. Los datos del CIS parecen indicar que quien más votantes de centro perdió en las últimas elecciones fue precisamente el PSOE, quien paso de recibir de un 40 a un 20 por ciento de los que se ubican ideológicamente en el 5. En cambio, este efecto no está tan claro en el caso del Partido Popular, cuyas pérdidas en ese espacio ideológico son más modestas.
El centro político según los datos del CIS se fue especialmente (en comparación a los otros grupos ideológicos) a las categorías de abstención y el misterioso “no contesta”. Está claro que por lo general el centro político no quedó satisfecho con la situación política de la anterior legislatura. Ambos partidos jugaron por los extremos; y parece ser que el PSOE es el que perdió más apoyos entre ese electorado.
Si el PP es muy radical y el PSOE muy poco, ¿por qué este último partido perdió más apoyos entre los votantes de centro? A priori parece algo incompatible, aunque como siempre hay muchos otros factores que entran en la ecuación. La explicación más sencilla, pero, es que simplemente los ciudadanos que valoran al PP como muy radical son sólo los votantes de izquierdas que no votarían al PP de todos modos. La opinión de los votantes de centro parece ser que es incluso la opuesta. A falta del estudio del PSOE, el instinto nos dice que, en la pasada legislatura, los votantes de centro percibieron especialmente al PSOE como un partido radical.
Conclusiones: El PP debe mejorar el efecto rechazo que generó su estrategia electoral de la pasada legislatura entre los votantes de izquierdas y que acabó activando el voto del miedo. Por otro lado, el PSOE debe tomarse en serio su perdida de base electoral entre los votantes de centro efectuando una legislatura más sosegada. Ya lo contaremos con más detenimiento en futuras anotaciones, pero la moqueta tiene la impresión que la tarea del PSOE puede ser más difícil que la del PP.
Como siempre un excelente post. Me parece que este "pero" al artículo de Público está muy bien puesto, y creo que acertáis en rebajar el optimismo del estudio del PSOE. Aún así me gustaría aportar yo también mi "pero":
El recuerdo de voto en la post-electoral de 2004 fue en mi opinión demasiado positivo para el PSOE (o negativo para el PP, más bien). Con demasiado quiero decir, más aún de lo que ya de por sí suele ser en las encuestas, por aquello de que los "no contesta" parecen estar siempre más a la derecha. En contreto, en Abril de 2004 recordaba un 48,9% haber votado al PSOE, frente al 23,9% que recordaba haber votado al PP. (ojo que estos datos los he tenido que extrapolar, porque la pregunta aquella vez fue distinta a la de este año e incluía a los que no habían votado). En Abril de 2008 han sido un 46% frente a un 26,8%.
Imagino que esa discrepancia puede tener que ver con parte de lo que se ve en la gráfica del recuerdo de voto del PSOE que habéis puesto.
En cualquier caso, repito, coincido con vuestro punto de vista en lo fundamental, y no creo que esto que indico yo, aún si no me he equivocado al poner los datos (que no fío ni yo), explicase por sí sólo toda la diferencia.
Gracias evaristo! por comentar esto pq es algo que tenía en mente durante esta tarde, porque es obvio que no salen las cuentas. Efectivametne detrás de los datos de el PSOE hay mucho de lo que dices. En el articulo de alex en "si ministro" (que es muy revelador) de la semana pasada se ve clarismiamnte que el recuerdo de voto del PSOE estaba mucho más sobre-estimado en el 2004 que ahora. Debía haber tenido en cuenta eso, sin duda. Pensaré en ello.
Por lo tanto, los datos indican (si es que indican algo) es una tendencia. Pero seguramente los cambios no son en absoulto tan extremos para el PSOE como se muestra en el gráfico. Pero seguro que marcan una tendencia, ¿verdad?
Muy interesante esta entrada, Lluís. Comparto la mayor parte de tus conclusiones, aunque no el argumento que utilizas para llegar a ellas. No me acaba de convencer eso que fueran los votantes de centro los que percibieran especialmente al PSOE como un partido radical. Al menos, según los datos de este estudio del PSOE, esta afirmación no se sostiene: sólo un 16% lo considera radical, ¿y son justamente los votantes de centro y no los de derecha y extrema-derecha los que lo consideran así? No lo veo claro.
Estoy de acuerdo en que el PSOE ha perdido apoyos en el centro político (los datos lo demuestran), pero no necesariamente ha sido como consecuencia de su presunta "radicalidad"; y es que no hace falta ser radical para perder votos. En su caso, es posible que incluso haya sido su "ausencia de radicalidad" en temas como la economía, el terrorismo o la inmigración (con un discurso en estos tres casos basado en el ya clásico "no estamos tan mal"), lo que le haya llevado a retroceder por el centro.
En fin, ya habrá tiempo de pensar sobre ello. Un saludo, moqueteros. :)
gracias becario monclovita. Quizás exageré en que el centro ve al PSOE radical y no al PP. Los datos como bien sugieres no parecen ser demasiado compatibles. En todo caso, me mantengo que la percepción de un "pp radical" está especialmente concentrado en la izquierda y mucho menos en el centro y derecha. Eso explicaría la compatibilidad del "voto del miedo" con el comportamiento de los votantes de centro. Yo si creo que el programa notoriamente ideológico del anterior gobierno ha espantado a muchos del centro. Pero, lo miramos más detenidamente para que no se quede en simples opiniones, te parece?
Muy interesante el análisis. En esta lesgisaltura, todo apunta que el PP no hará una oposición tan radical (cuando la empiece, calro está, pq de momento siguen pájaros). Cabe ver si con un PP más moderado, el PSOE sabe gobernar y demostrar. Ya se sabe aquéllo de contra Franca vivíamos mejor. Tener un 'enemigo' radical permite cualquier tipo de defensa y permite jugar a las odiosas comparaciones. Saludos.